Escapadas singulares en familia: alternativas al típico hotel

Alternativas a alojarnos en un hotel, de eso trata el post de hoy, ¡sí! porque viajar con niños es maravilloso pero la logística es mucho más complicada que si viajes en pareja. Nosotros hemos sido de alojarnos en hotel durante muchos años pero toca renovarse, open mind y este año exploramos alternativas a la habitación de hotel, que además sean más espaciosas para convivir con los peques varios días (y meter los trastos que les acompañan jejeje)… Nos vamos a una panera asturiana, oleee, a disfrutar en una casa diferente rodeada de un jardín de hortensias maravilloso (experiencia a la vuelta, prometida).

Si aún eres de los tardíos en buscar unos días de desconexión no dejes de leer esta entrada con alojamientos alternativos para viajar en familia:

·         Tiendas de campaña, pero no te imagines la típica de mochilero, hay opciones espectaculares como Forest Days, en Navés, Lérida, una tienda de campaña de 25 metros cuadrados, cada tienda cuenta con un espacio de cinco hectáreas de bosques y prados y están cuidadosamente decoradas con mobiliario de jardín. También cuentan con un baño ecológico, cama doble, estufa de leña y calentador, para el invierno. Este alojamiento es apto para niños a partir de 6 años y cuenta con dos alternativas: alojarnos todos juntos dentro de la tienda principal con un máximo de 4 personas o instalar una tienda mini a poca distancia de la principal para nuestros hijos. La tienda más pequeña tiene capacidad para hasta 3 niños. Simplemente WOW!

·         Cabaña en un árbol, otra idea original que les va a encantar a los pequeños: despertarse en lo alto de un árbol escuchando el sonido de los pájaros y viendo el amanecer. En España existen varios alojamientos de este tipo, como Los Nidos De Santa María son unas cabañas en los árboles ubicadas en el entorno del Parque Natural de Cazorla, en Arroyo Frío. Un auténtico paraíso para los amantes de la naturaleza, ya que puedes despertar por la mañana admirando el paisaje y la naturaleza en estado puro. Y qué os parecen estas casas en Huétor Santillán (Granada). Esta cabaña, hecha de materiales reciclados y renovados, está a dos metros de altura. Cuenta con grandes ventanales, que nos permiten ver las ramas de los árboles y estar en contacto con este espacio natural, en el que predominan encinas autóctonas del Parque Natural de Sierra de Huétor. Este alojamiento es apto para familias con niños, ya que tiene una capacidad de hasta cuatro personas. Cuenta con dos camas de 1,50 metros, una de ellas situada en un altillo, y un W.C. seco en la misma cabaña. En las zonas comunes tenemos baños y duchas para compartir, cocina exterior y hamacas.

·         Cueva con encanto, como estas cuevas bioclimáticas ubicadasen Guadalajara, y decoradas de forma sencilla que nos recordaran a los primeros pobladores de la zona, todo en un tono neutro blanco, desnudo y sin apenas adornos para que toda nuestra atención se centre en la naturaleza que nos rodea, disfrutando de preciosos atardeceres sobre el río, contemplando el inmenso cielo estrellado y jugando con nuestros pequeños a buscar planetas y estrellas. Todas las cuevas disponen de terraza y jacuzzi (esto último ideal pero no sé si con niños se le puede dar uso…).  Las cuevas siguen los principios del desarrollo sostenible mediante la regulación térmica natural en defensa de las energías renovables, esto hace que una bolsa de aire almacenada, fría en verano y cálida en invierno circule desde el sótano hasta el tragaluz aportando un aire natural y unas temperaturas agradables.

·         Un carromato de circo, un sitio alucinante para que tus peques disfruten. El hotel del Circo Raluy posiblemente sea el único hotel itinerante del mundo, una oportunidad para los amantes del circo de dormir en un auténtico carromato, totalmente reformado, y observar el día a día de la vida nómada de los artistas circenses. El alojamiento es un carruaje del año 1939 restaurado y adaptado para ofrecer todas las comodidades a los clientes pero sin perder el encanto de las carrozas de la época y respetando el entorno clásico del Circo Museo Raluy.

¡A la vuelta nuestra experiencia en la panera asturiana, prometido!